Beber es un acto cultural. Hoy más que nunca es importante conocer el origen de aquello que comemos, pero también de lo que bebemos.

Beber es un acto político. Cada decisión que tomamos está apoyando una forma de vida, un sistema de producción y un respeto (o no) por la naturaleza y nuestro entorno.

Cantina del Funk es una asociación educativa donde aprender y acercarse a las bebidas fermentadas el vino, la cerveza y el sake desde una perspectiva didáctica y divertida. Es un espacio de debate para mentes curiosas y abiertas, donde poner en común todo aquello que nos crea curiosidad entorno a una mesa.

Todos los productos con los que trabajamos son artesanos, de mínima intervención y creados con consciencia ecológica.

Dialogamos desde la cercanía y la humanidad para acercar la cultura de las bebidas. Aquí el conocimiento es bienvenido pero la falta de él no supone un impedimento para empezar a aprender.